"Si España ha de debatir el futuro de la monarquía, no parecen buenos procedimientos ni la tea ni la vileza, por mucha solera que tenga en España lo de despellejar a los vivos con el cuchillo de los muertos, o de los que no pueden usarlo."
Rompiendo la rutina, así comienzo esta noche. Acostumbro a poner una cita de alguna canción que me guste al final de cada entrada, ya sea por endulzar lo leído anteriormente, o por colocar en este blog palabras de alguien que sepa escribir realmente.
Pero la cita se encuentra hoy al principio y no al final; y no se trata de una canción, sino la opinión de un periodista ante una de las noticias más controvertidas del día. No pretendía romper con la estructura de las anteriores entradas, no es esto algo pensado de antemano, pero esta tarde-noche, mientras escuchaba a Iñaki dando las noticias, me impactaron sus palabras, impecables en forma y contenido, alejadas de la tónica estéril de la mayoría de informativos. Iñaki acostumbra a informar y a opinar, lo que en un informativo de prime time resulta bastante difícil ( las bromitas de Matías no cuentan).
Dejando atrás las disputas de share entre ambos grandes comunicadores, he de reiterar que no les falta razón a las palabras de Iñaki. Desconozco si esto sucede exclusivamente en España, pero cierto es que estamos ya acostumbrados a ver como se airean los trapos sucios de cualquier personaje, en cualquier medio televisivo o escrito, a cualquier hora. Personalmente me resultan bochornosas estas actuaciones, y más cuando aluden a personas que no pueden defenderse, o que están muertas, ya que se les está negando un turno de réplica que seguramente sonrojaría a más de un tertuliano o sensacionalista.
Sin ir más lejos, hace algunos días, tuve la desgracia de ver como en televisión se empezaba a "rentabilizar" la figura de Antonio Puerta, con supuestos* conflictos en torno a su herencia, y una también supuesta* acalorada discusión entre la madre y la novia de Antonio mientras éste se debatía entre la vida y la muerte...¡ bravo A3 !, habeís conseguido encontrar la forma de obtener un nivel de audiencia impresionante...pero la dignidad la habeís perdido de manera estrepitosa, y dudo que algún día volvaís a encontrarla...aunque, ¿quién es esa tal dignidad?, ¿se habrá acostado con algún famoso?, en caso contrario ¿para qué la necesitamos siendo líderes de audiencia? ( preguntas extraídas de las reflexiones de más de un programador de televisión endiosado por sus cifras de audiencia).
Dejo el debate sobre el futuro de la monarquía en España y la valoración de los incidentes ocurridos en Cataluña a este respecto para otro momento; al tiempo que os invito a leer la reflexión completa de Iñaki en la tarde de ayer, ya que os ayudará a entender la conclusión que he colocado al incio de esta entrada.
*Supuesta: adjetivo utilizado casi en exclusividad por tertulianos de programas del corazón, que viene a significar: "me acabo de inventar esta noticia mientras me tomaba el café hace una hora". Puede darse el caso de que dicho adjetivo sea sustituido por "me informan mis fuentes", "me comentan", "se rumorea", etc; pero no engañarse, en estos casos la milonga que nos cuentan sigue siendo igual de grande, y en ocasiones aún mayor!
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