La noche invitaba al insomnio, inevitable. Se me han presentado diferentes motivos a lo largo de mi vida para caer en el insomnio, esta noche les tenía a todos a mi lado. El cuerpo a trozos: unas piernas rotas por un lado, sedadas a base de ibuprofeno, lo que daría más de uno (incluido éste que firma) por una sustancia similar, capaz de "ocultar" (aparententemente y durante un tiempo limitado) las miserias y seguir adelante como si nada (corrijo, sí que existen, pero no tengo contactos en Holanda...de momento!).
Del otro lado una mente ausente, postrada al frío de la noche, aporreando una puerta que nunca conseguirá abrir, mendigando migajas de lo que fue, necesitando más que nunca del abrigo que le ofrecen sus recuerdos.
Este cajón desastre (eufemísticamente denomidado "blog") nació para noches como ésta, pero es curioso que sea en ésta, ya la séptima entrada (6+1), cuando realmente comience a hacer honor a su nombre, y probablemente sea ésta la primera nota desde el insomnio.
Rendido a la tele intento aumentar la velocidad de las agujas del reloj, a pesar de que las alternativas que me ofrecía no conseguían despertar mi interés (era éste el único que conseguía dormir). Descarto todas excepto dos: un documental emitido por la televisión pública sobre la Transición a la Democracia (¿Ha terminado ya este período?) y un adulterado debate sobre la madurez de la sociedad española ante los temas actuales de controversia (no me dirás que dicho así no parece interesante el enésimo programa de famoseo con el que Tele 5 abarrota su progaramación! xD).
Convencido de no vivir en esa democracia que tan bien nos venden, que tan fotogénica es en época electoral, mientras el resto del tiempo viaja en maletines, se viste de comisiones y favores, o, en el mejor de los casos, duerme en la litera de alguna prisión. (El tipo con bigote de las siestas en Tele 5 encarna todos éstos valores, así como unos pantalones que desafían a la mismísima ley de la gravedad, y una compañera sentimental con grandes dotes para la interpreteción, ya sea en un escenario o en un estrado, ante cientos de fans o ante un tribunal de justicia).
Del debate qué podemos decir, pues que quitando el maquillaje de mi anterior definición, nos queda sólo un bochornoso careo, que podía resumirse en un Homófobos Vs Homosexuales: de un lado de la mesa (la parte derecha, curiosamente) tres tipos trajeados, de retórica impecable pero de contenido absolutamente sonrojante para la época que vivimos; del otro lado (la izquierda, también igual de curioso) otros tres personajes, cuyo argumento se basa en la descomunal potencia de sus cuerdas vocales, en los kilos de maquillaje que llevan encima, y en el tamaño del escote de una de ellas.
Ante tal panorama, me voy a domir, ya no queda tanto para el amanecer, lo peor ha pasado.
Pd: Ningún canal de la competencia de Tele 5 se hace cargo de engordar mes a mes mi cuenta corriente.
"En medio del mar te sientes como en un desierto...primavera ven y cúrame el invierno"
