lunes, 19 de mayo de 2008

Amanece, que no es poco

Hoy me he propuesto resucitar un poco esto, lo que quiere decir que las ganas morirán mañana y a otra cosa, como todo lo que llego a proponerme.

O quizá no, quizá logre esto engacharme tanto como tú lo has hecho, y siendo sincero, quién no desearía algo así.

Y ahora busco contar algo que no haya contado antes, busco no repetirme, porque llevo dos meses en los que todos los días son iguales, en los que valdría la misma reflexión. Esto no quiere decir que no hayan pasado cosas, porque las ha habido, muchas y muy grandes, pero quizá no he pasado yo por ellas de la misma forma que ellas lo han hecho por mi.

Violación de los Derechos Humanos en China con la brutal represión a Tíbet, resultado electoral en España, crisis en el PP, gobierno feminista en España, renacimiento del fascismo en Italia, 31ª Liga para el Real Madrid, caciquismo policial en Coslada...parece que temas de los que hablar ni me faltan ni me han faltado; y sin embargo estoy haciendo lo que me es mas difícil: hablar de mi. Quizá porque a todos esos temas les dediqué solo una mirada, mientras la cabeza y los pensamientos andaban perdidos en otro lado...y aún hoy sigo esperando noticias suyas.






Y para resucitar (y tapar mi déficit temporal de palabras) elijo una canción que me recuerda mucho, y también me da mucho que pensar, y es que cada vez que la escucho le encuentro un sentido distinto. Quizá porque en algún momento, todos hemos estado perdidos en cualquier lado, soñando con escapar...